Conducir de noche es una actividad que fácilmente podemos subestimar, a veces no tenemos en cuenta que exige habilidades extra que no solo dependen de nosotros sino también de nuestro vehículo y entorno.
Te dejamos los siguientes consejos para estas ocasiones:
- ¡Enciende las luces!: la verdad se lee obvio, es posible que no necesites las luces para ver el camino por el que vas si está iluminado, pero eso nos hace visibles para otros conductores en la vía, permite anticiparse a obstáculos en la vía y conducir con ellas es obligatorio.
- Reduce la velocidad: esta debería ser una norma general al conducir de noche, ya que en estos horarios nuestro cerebro puede demorarse un poco más en reaccionar ante algún peligro, peatones u obstáculos.
- Lee las señales de tránsito: sobre todo las que nos advierten de algunos animales en la vía. Es recomendable reducir la velocidad cuando hay cruce de fauna silvestre. Ellos no saben cruzar las carreteras y podríamos tener un accidente.
- Revisa que tus faros, parabrisas y espejos estén limpios: estos elementos deben estar en óptimas condiciones siempre, pero en la noche es muchísimo más necesario tener efectividad en nuestra visión.
- Si tienes pantallas en tu tablero, intenta ponerlas en modo nocturno, las luces que están en el interior del vehículo pueden ser molestas para nuestra visión y disminuye nuestra concentración en carretera.
¿Te gusta conducir de noche? Sé un conductor ejemplar, mantente alerta y sigue nuestros consejos. Esperamos tus comentarios si tienes alguna recomendación adicional.
Andina, lo que necesitas para llegar más lejos.
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