Al cumplir la edad necesaria para poder conducir, esta actividad se convierte en una necesidad. Incluso para las las personas con alguna discapacidad física. Sin embargo este proceso para ellos aveces puede ser más complejo.
En Andina queremos decirles que sí se puede. Tenemos la misión de ayudar a cumplir su sueño de conducir a nuestros alumnos sin importar su condición y convertirlos en conductores ejemplares.
¿Cómo podemos ayudar?
Somos conscientes de las posibles dificultades que podrían tener personas con algún tipo de discapacidad física tras colocarse al frente de un volante, por eso nos adaptamos a ellos y así conseguimos ayudarlos a dominar el vehículo.
Siempre buscamos personalizar las técnicas de conducción, para así según sea el caso, poder responder a las necesidades del aprendiz.
¿Qué opinan nuestros alumnos sobre la oportunidad de realizar un curso con nosotros?
Si deseas conocer otra experiencia puedes acceder aquí.
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Excelente, la discapacidad no es un impedimento para aquellos que pueden sacar provecho de las facultades que tienen, desafortunadamente vivimos en una sociedad anti discapacidad, pero esperamos que esto vaya mejorando cada vez mas y los discapacitados tengamos mas oportunidades para ser parte integral de esta sociedad.