Conducir en condiciones adversas en un clima tan variable como el de Colombia puede ser todo un desafío. Así que en este artículo hablaremos sobre cómo conducir de manera segura en la lluvia, granizo, niebla o viento.
Durante la lluvia
- Cuando conduces sobre el suelo mojado, especialmente bajo lluvias fuertes, el control del vehículo es inestable. En estas circunstancias se reduce la adherencia de los neumáticos y el tiempo de frenado aumenta. Así que ten en cuenta estos mínimos:
- Revisa que tus llantas estén en buen estado, no pinchadas, desgastadas y con la presión indicada por el fabricante.
- Sujeta con firmeza el volante y evita hacer giros o movimientos acelerados para conservar la estabilidad.
- Evita los frenazos bruscos y usa el parabrisas y la calefacción o aire acondicionado para mejorar la visibilidad.
- Mantén la atención en la vía todo el tiempo, pues en un aguacero las ramas, lodo u objetos en la vía no se hacen esperar.
- Procura no adelantar o esquivar objetos a altas velocidades y en caso de encontrar arroyos sobre la carretera busca vías alternativas antes de intentar cruzar, esto puede comprometer tu seguridad y la integridad del vehículo.
Si hay granizo
- Si debes tener precaución al conducir lloviendo, con granizo debes tener el doble.
- En estos casos lo más recomendable es detener el vehículo, encender las luces de parqueo y esperar que cese el granizo pues el hielo es peligroso y el impacto en el carro puede causarle daños.
- En caso que no puedas parar, procura conducir a la velocidad más baja posible, siempre con los parabrisas activos y las luces de parqueo encendidas hasta un lugar seguro en el que puedas detenerte.
En caso de niebla
La niebla es una de las condiciones meteorológicas más temidas por los conductores y por eso debes estar concentrado 100%, ya que hay situaciones donde la baja o nula visibilidad puede causar accidentes que comprometen la seguridad.
- Enciende las luces medias y de parqueo, nunca utilices las luces altas ya que rebotan y empeoran la visibilidad.
- Guíate por las líneas reflectivas que marcan los carriles o puedes seguir a otros vehículos sin exceder una distancia de seguridad.
- Evita que el vidrio se empañe usando la calefacción o aire acondicionado.
- Ante cualquier riesgo, duda o cansancio visual hazte a un costado y abandona la vía hasta que mejoren las condiciones de visibilidad.
Si el viento sopla fuerte…
Aunque parece inofensivo, el viento es traicionero y puede causar accidentes mientras conduces. Cuando sales de viaje es común encontrar carros con maleteros, bicicletas y/u otros elementos en la parte superior o trasera que no componen la carrocería del vehículo. Todos ellos causan cambios aerodinámicos según la velocidad de conducción y la cantidad de viento y aunque no representan un peligro a simple vista es mejor prevenir:
- Ojo con el fenómeno conocido como el efecto pantalla que se produce al adelantar un camión en carretera y en el que sentimos cierta succión hacia los vehículos paralelos a nosotros. Evita este tipo de maniobras o hazlas con precaución.
- Conduce de manera conscientemente y toma con firmeza el volante ya que cualquier cosa por pequeña o insignificante que parezca puede modificar la trayectoria del vehículo y sacarlo de la vía causando un accidente y poniendo en riesgo la seguridad de todos.