Contar con las llantas calibradas y balanceadas, no solo es un alivio para tu vehículo, sino que es tranquilidad para ti y los que te acompañan. Los neumáticos son el único punto de unión entre el automotor y el suelo, por eso el estado en que se encuentren afecta de manera directa la eficacia de la frenada y la seguridad sobre pavimento mojado. ¿Importante no? Por eso como escuela #1FormandoConductores te indicamos algunos consejos para cuidarlos y saber cuándo es momento de cambiarlos
1. Verifica semanalmente la presión de los neumáticos. Esto te permitirá monitorear si se han pinchado y evitarán que el rin u otras partes del vehículo se afecten.
2. Evita frenar y arrancar bruscamente. Cuando lo haces desgastas innecesariamente el caucho con el pavimento.
3. Baja la velocidad cuando circules por vías sin pavimentar o pases por encima de vidrios rotos.
4. Recuerda hacer alineación y balanceo de tus llantas cada 6 meses o cada 10.000 km. lo que primero se cumpla. Es decir verificar que hagan contacto preciso con el suelo y poner pequeñas pesas para nivelar el desgaste normal de la llanta.
5. Porta siempre la llanta de repuesto (en buen estado) en tu carro hace parte del kit obligatorio de carretera.
6. Cámbialas cada 2 0 3 años o cada que recorras entre 40.000 y 50.000 km. Recuerda además al momento de comprarlas que estas tienen fecha de vencimiento en promedio de 5 años, por tanto si tienes dudas asesórate con tu mecánico de confianza.
Con estas recomendaciones podrás darle más y mejor vida a las llantas de tu vehículo. Así que recuerda mantenerlas en buen estado para que sigas disfrutando tranquilo el camino. ¿Te gustó este artículo? Compártelo en tus redes sociales e invita a más personas a ser #ConductoresEjemplares.